Verde Eucalipto

[vc_row][vc_column width=»1/2″][vc_column_text]La primera vez que escuché hablar de la moringa fue en la televisión y de inmediato me llamó la atención por todos los beneficios que ofrecía.

Sin duda en ese momento no sabía mucho, pero pronto descubrí, al investigar un poco más, que puede ser el suplemento del futuro.[/vc_column_text][vc_single_image image=»2421″ img_size=»410 x 370″ magnify_zoom_hover=»» fade_me=»» css=».vc_custom_1579646431867{padding-top: 5px !important;padding-bottom: 5px !important;}»][vc_column_text css=».vc_custom_1579646306232{padding-top: 5px !important;padding-bottom: 5px !important;}»]

Ayuda a combatir enfermedades como el asma.»

[/vc_column_text][vc_column_text css=».vc_custom_1579646192328{padding-top: 10px !important;}»]La moringa, también llamada “árbol de la vida” es una planta medicinal que posee un elevado contenido de vitaminas y minerales.

La moringa se ha utilizado desde hace muchos años en la práctica ayurveda de la India para el alivio de más de 300 dolencias distintas.

Es utilizada para tratar algunas enfermedades respiratorias, disminuir la ansiedad, en la pérdida de peso e inclusive controlar la glucosa sanguínea en diabéticos. 

El árbol de la Moringa, es muy generoso. Todas sus partes como la corteza, hojas, raíz, frutos, flores y semillas, se usan para curar o prevenir varias enfermedades, 

La parte más usada es la hoja, que es donde se encuentra la mayor concentración de antioxidantes, y pueden ser consumidas en forma de té, cápsulas o polvo.

Sabes lo que contiene:

Tan sólo una cucharada de hoja seca de Moringa aporta minerales y vitaminas como Calcio, Magnesio, Hierro, Vitamina A, B1, B2, B6, C, E y Ácido fólico.

Entre las enfermedades tratadas está el asma o los dolores en las articulaciones; incluso se usa para favorecer la producción de leche materna.

El doctor Mark Olson, del Instituto de Biología de la UNAM, señala que en México la moringa es utilizada más por su uso medicinal que por el nutritivo. [/vc_column_text][vc_column_text css=».vc_custom_1579646534357{padding-top: 10px !important;}»]

Los beneficios más comunes por consumir Moringa

Es un básico para la obtención de calcio. La riqueza de magnesio también contribuye a la fortaleza de los huesos.

La quercitina refuerza el poder anticancerígeno y antidegenerativo de la moringa.

Te ayuda a reducir los niveles de colesterol LDL y placas de grasa en la sangre y a la larga previene los accidentes cardiovasculares.

Aumentar la capacidad respiratoria, ayudando a combatir enfermedades como el asma.[/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=»1/2″][vc_column_text]Prevenir la diabetes porque reduce los niveles de azúcar en la sangre, mejorando la protección contra el daño celular.

Regular la presión arterial, debido a que mejora la circulación sanguínea por su efecto vasodilatador.

Previene y combate la anemia, gracias al alto contenido de hierro de sus hojas, lo que favorece al aumento de los glóbulos rojos.

Sus antioxidantes, como polifenoles, vitamina C y betacaroteno, estimulan el sistema inmune y aumenta las defensas.

Su efecto antiinflamatorio y analgésico alivia el reumatismo y la inflamación de la próstata.

Su larga lista de vitaminas protege e hidratar la piel, favoreciendo la cicatrización de la piel.

Su alto contenido en fibra, ayuda a combatir el sobrepeso y a prevenir las úlceras estomacales y el estreñimiento.

Ayudar a tratar las hemorroides, debido a que mejora la circulación sanguínea causando un efecto vasodilatador.

Mejora la visión gracias a su elevado contenido de beta caroteno.

Favorece el balance natural de las hormonas afectadas durante la menopausia. Mantiene los niveles de inflamación y de estrés oxidativo en armonía. [/vc_column_text][vc_single_image image=»2419″ img_size=»410 x 450″ magnify_zoom_hover=»» fade_me=»» css=».vc_custom_1579646414069{padding-top: 10px !important;padding-bottom: 10px !important;}»][vc_column_text]

Algunas formas de uso recomendadas

Cápsulas: 1 a 2 cápsulas al día de 200 mg por día en conjunto con las comidas.

Polvo: De 1/2 a 1 cucharadita al día (1 a 3 gramos), pudiendo agregarse en los jugos, sopas, café o yogures o incluso a preparar como té con el polvo. [/vc_column_text][vc_single_image image=»2420″ img_size=»450 x 450″ magnify_zoom_hover=»» fade_me=»»][/vc_column][/vc_row]