[vc_row][vc_column width=»1/2″][vc_column_text]Hay muchas personas que no resistimos la tentación de comer de vez en cuando productos como pan, repostería o alguno que otro alimentos frito. Pero ¿han oído hablar de las grasas trans o hidrogenadas?
La industria alimenticia utiliza un proceso químico de hidrogenación para solidificar los aceites vegetales de estos productos.
Hasta aquí todo parece muy bien, pero numerosos estudios de la OMS revelan que estos ácidos aumentan el riesgo de padecer enfermedades, donde destacan:
- Aumentan el Colesterol y los triglicéridos, además destruyen el el llamado “colesterol bueno”.
- Arterioesclerosis, que dificulta el paso de la sangre y provoca la muerte súbita.
- Síndromes metabólicos.
- Diabetes mellitus o de tipo 2.
- Inhibe algunas transformaciones de otros ácidos grasos esenciales.
- Retrasan el crecimiento y la maduración del cerebro.
- Tumores.
- Alteraciones en embriones y fetos antes de nacer.
- Depresión.
El peligro de las grasas trans: en la mira de Harvard
La lista de quienes usan esta grasa abarca desde margarinas, pan y repostería industrial, alimentos fritos preparados, alimentos procesados, cereales para desayuno, galletas dulces, barritas dulces, hamburguesas y papas fritas.
Las fuentes de los ácidos grasos trans son dos: natural y artificial o industrial. Una vez consumidos, los ácidos grasos trans se absorben por el aparato digestivo y pasan a la sangre.
Las grasas trans (AGT) son ácidos grasos insaturados que se forman de forma industrial al convertir aceite líquido en grasa sólida (proceso llamado hidrogenación).[/vc_column_text][vc_single_image image=»1676″ img_size=»full» magnify_zoom_hover=»» fade_me=»» css=».vc_custom_1567102598821{padding-top: 10px !important;}»][/vc_column][vc_column width=»1/2″][vc_column_text]También se conocen como ácidos grasos trans, aceites parcialmente hidrogenados y grasas trans-colesterol.
Estos ácidos trans son un tipo de ácido graso insaturado que se encuentra principalmente en alimentos, su ingesta excesiva puede ser perjudicial para el organismo.
El peligro de las grasas trans: cocinar o aderezar
Para cocinar, prefiere aceites que soporten altas temperaturas y que tengan bajo contenido de ácidos grasos poliinsaturados.
Las mejores opciones son aceite de oliva, coco, aguacate, canola y nuez de macadamia.
Mientras que para aderezar, opta por aceites que además de buen sabor, aporten ácidos grasos poliinsaturados. Las mejores opciones son aceites de semillas y oleaginosas como linaza, semilla de uva, ajonjolí, almendra o cacahuate. [/vc_column_text][vc_single_image image=»1062″ img_size=»full» magnify_zoom_hover=»» fade_me=»» css=».vc_custom_1567102612694{padding-top: 10px !important;}»][vc_column_text]
Elige siempre tu salud, elige Verde Eucalipto Toxic Free Market!»
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Considera que los aceites de oliva, soya, canola y aguacate pueden ser utilizados tanto para aderezar como para freír ya que además de tener buen sabor soportan altas temperaturas.
Un dato importante: intenta freír menos, especialmente a temperaturas altas.
Si estás friendo minimiza la cantidad de aceite que usas y también toma medidas para tratar de retirar el aceite del exterior de la comida, quizás utilizando un papel absorbente.
Finalmente, recuerda que las grasas hidrogenadas son las que más indicadores tienen en su contra, lo que hace que nadie las recomiende. [/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]